El domingo 17 de mayo de 2015 debutó en las pantallas de la señal pública, con 10.3 puntos promedio, la que se transformaría en su última gran superproducción que retrocedió en el tiempo. En esta oportunidad, una historia ambientada en 1890 que relató el caso de Carmen Marín, el primer exorcismo documentado en Chile y Latinoamérica.
En su capítulo final, el más visto de la teleserie con un promedio de 11.3 unidades, la televisora señaló: “La verdadera Carmen Marín desapareció sin dejar rastro después de ser exorcizada por el padre Raimundo Zisternas el 1 de agosto de 1857 en el Hospicio de las Hermanas de la Caridad. Uno de los doctores que la examinaron durante el proceso, el visionario doctor Manuel Antonio Carmona, dijo de ella: ‘Dicha Carmen Marín no es poseída ni tampoco desposeída de tal demonio. Todo lo que hay de portentoso en ella es una rara manifestación de su alma (Santiago, septiembre 1857)’”. El epílogo incluyó un tema cantado por Luciana Echeverría y Gabriel Cañas, quienes también compusieron la letra y la musicalizaron junto a Tiago Correa, César Sepúlveda, Juan Pablo Ortega y Alejandro Ortega.
“La Poseída” fue escrita por Josefina Fernández, Francisca Bernardi, Hugo Morales y Juan Pablo Olave, dirigida por Víctor Huerta y Rodrigo Meneses, y contó con la producción ejecutiva de Rodrigo Sepúlveda, la producción general de Mauricio Campos y las actuaciones de Luciana Echeverría, Amparo Noguera, Marcelo Alonso, Francisco Melo, Jorge Arecheta, Patricia Rivadeneira, Daniela Ramírez, Tiago Correa, Antonia Zegers, Magdalena Müller, Diego Ruiz, Óscar Hernández, Taira Court, Francisca Gavilán, Alicia Rodríguez, Gabriel Cañas, Ignacia Baeza, César Sepúlveda, Emilia Noguera, Francisco Ossa, Hugo Medina, Gabriela Arancibia, Constanza Contreras, Camila Roeschmann y Agustín Canales. En el equipo de la reconstrucción de época también destacaron la directora de arte Paulina Braithwaite, el diseñador de vestuario Germán Droghetti y el escenógrafo Pedro Miranda.
La historia
Carmen Marín (Luciana Echeverría) es una joven de aspecto angelical que cautiva con su extraña naturaleza. Vivió en un conventillo junto a su hermano y su madre, una prostituta del barrio La Chimba, hasta que fue entregada al cuidado de las monjas debido a unos extraños ataques convulsivos que fueron atribuidos a una posesión demoníaca. Sor Juana (Amparo Noguera), la madre superiora, se hizo cargo de la niña y al parecer la vida junto a las monjas le dio la paz que necesitaba y los ataques cesaron.
Después de años de calma en el convento, cuando ya es una adolescente, Carmen sufre un nuevamente las convulsiones, mucho más fuertes que las de su infancia. El terror se apodera de la madre superiora, el rumor se expande. Carmen se transforma en un fenómeno del que se habla en los diarios. Sus compañeras de estudios ahora le temen y las madres la quieren fuera del convento.
El arzobispado envía al padre Raimundo Zisternas (Marcelo Alonso), exsoldado, veterano de la guerra del Pacífico que encontró la vocación por el sacerdocio en medio de los horrores de la batalla. La fe del padre Zisternas es inquebrantable y cree que el demonio es tan real como dios. La extrema pureza de Carmen le llama la atención y a pesar de que lucha contra sus sentimientos, Raimundo no puede evitar sentirse atraído por ella.
El gobierno, compuesto por liberales y miembros de la naciente clase intelectual, desea terminar lo antes posible los rumores de una endemoniada que habita Santiago, atribuyen esas creencias a la ignorancia del pueblo y las consideran supercherías de la iglesia católica. La misión de dar una explicación racional a este fenómeno se la encomiendan a Gabriel Varas (Jorge Arecheta), médico llegado hace poco de Paris donde estudió los últimos avances de la medicina. Desde la primera vez que lo ve, Carmen está segura que él es el único que puede ayudarla. Carmen se enamora perdidamente de él, mientras Gabriel intenta por todos los medios curarla de su mal, seguro de que se trata de un caso de histeria. Durante el tratamiento, Gabriel se fascina con la naturaleza salvaje de Carmen, su objeto de estudio se va transformando en un enigma que le atrae y no deja de pensar en ella.
Pronto Gabriel reconoce que se ha enamorado de la joven, pero no puede estar con ella porque está comprometido con Luisa Mackenna (Emilia Noguera), hija de don Eleodoro Mackenna (Francisco Melo), ilustre miembro de la aristocracia santiaguina, íntimo amigo del arzobispo y candidato a la presidencia por el partido conservador. Gabriel encuentra en su futuro suegro un poderoso rival, que no ve con buenos ojos el compromiso de su hija con este doctor de aires liberales y tampoco la manera en que Gabriel lleva el caso de la endemoniada, menospreciando a la iglesia y sus creencias.
Don Eleodoro usará su poder y astucia para envolver a Gabriel en una delicada trampa, cuya carnada es la propia Carmen Marín y su objetivo: Ser el próximo presidente de Chile. Raimundo y Gabriel pondrán en conflicto la fe, la razón y sus sentimientos. Lo único que los une es el deseo férreo por rescatar a esta angelical joven de su mal.
Los personajes
Carmen Marín (Luciana Echeverría) es una joven de aspecto angelical y mirada intensa que cautiva con su extraña naturaleza. Su madre es una prostituta del barrio La Chimba que la entregó al cuidado de las monjas debido a unos extraños ataques convulsivos que fueron atribuidos a una posesión demoníaca. Sor Juana, la madre superiora, se hizo cargo de la niña y al parecer la vida junto a las monjas le dio la paz que necesitaba, los ataques cesaron. Después de años de calma en el convento, cuando ya es una adolescente, Carmen sufre un nuevamente las convulsiones, mucho más fuertes que las de su infancia. Marín se transforma en un fenómeno del que se habla en los diarios. El arzobispado envía a un sacerdote a investigar, se trata del padre Raimundo Zisternas, mientras tanto para acallar los rumores que asustan al pueblo el ministerio de salud le encarga al doctor Gabriel Varas, diagnosticar a la joven. Ambos intentarán ayudarla, uno salvándola de satanás y el otro demostrando que esto es una enfermedad que tiene cura en la ciencia, sin pensar que en el proceso comenzarán a sentirse fuertemente atraídos por ella. Carmen poco a poco va notando extrañas circunstancias que la hacen cuestionarse su origen.
Sor Juana Correa (Amparo Noguera) es la madre superiora del convento. Cuenta con un gran prestigio dentro de la congregación, conocida por ser una monja seria y estricta, muy celosa de la castidad, dedicada completamente a la vida espiritual y a la educación de las niñas. Ha regido el convento y el colegio con mano firme y progresista, su enseñanza es muy revolucionaria para la época, por primera vez en Chile se mezcla el aprendizaje de las labores del hogar con temas masculinos tales como la filosofía, aritmética, entre otros. Carmen resulta ser una excelente alumna y nadie entiende por qué la monja está siempre tan preocupada de ella, con quien es especialmente estricta. Una fatídica noche, poco antes de cumplir los diecisiete años, Carmen tiene un ataque de violencia y una fuerte carga sexual. A la religiosa no le caben dudas de que es el demonio el que ha poseído a la muchacha, y junto con el Padre Raimundo inicia una cruzada por defenderla, en la que Sor Juana verá revelados sus más oscuros secretos.
Raimundo Zisternas (Marcelo Alonso) es un exsoldado, veterano de la guerra del Pacífico que encontró la vocación por el sacerdocio en medio de los horrores. Su fe es inquebrantable y cree que el demonio es tan real como dios. Cuando comienza su investigación y conoce a Carmen se deslumbra por su extrema pureza, no tiene dudas de que está poseída y rescatarla de las garras de satanás se convierte en una misión personal, incluso a costa de su propio sacrificio. A pesar de que lucha contra sus sentimientos, Raimundo no puede evitar sentirse atraído por la joven.
Gabriel Varas (Jorge Arecheta) es un médico llegado hace poco de Paris donde estudió los últimos avances de la medicina, por lo mismo el gobierno le encarga la misión de dar una explicación racional al caso de la endemoniada de Santiago. Gabriel intenta por todos los medios curarla de su mal, seguro de que se trata de un caso de histeria como los que él mismo presenció en Paris y le da esperanza de que su mal tiene explicación científica y se puede curar. Durante el tratamiento se fascina con la naturaleza salvaje de Carmen, su objeto de estudio se va transformando en un enigma que le atrae y no deja de pensar en ella. Pronto Gabriel reconoce que se ha enamorado de la muchacha, pero no puede estar con ella porque está comprometido con Luisa Mackenna, hija de don Eleodoro.
Eleodoro Mackenna (Francisco Melo) es un ilustre miembro de la aristocracia santiaguina, íntimo amigo del arzobispo y candidato a la presidencia por el partido conservador. Este no ve con buenos ojos el compromiso de su hija Luisa con Gabriel, un doctor de aires liberales, y tampoco la manera en que Gabriel lleva el caso de la endemoniada, menospreciando a la iglesia y sus creencias. Don Eleodoro usará su poder y astucia para envolver a Gabriel en una delicada trampa, cuya carnada es la propia Carmen. Los métodos de Eleodoro distan mucho de ser los del caballero elegante y aristócrata que aparenta. Mackenna es un hombre frontal y de carácter, eso todos lo saben, pero la mayoría ignora que se trata de un hombre despiadado, sin escrúpulos, con oscuros vicios e inimaginables secretos, capaz de eliminar a quien se cruce por su camino.
Ernestina Riesco (Patricia Rivadeneira). La esposa de Eleodoro es una mujer enteramente dedicada a su hogar: recatada, noble y muy creyente, todos la adoran. Ama a sus hijos (Melchor, Luisa y Vitalia) y es el pilar indiscutido de la gran casona Mackenna. Sin embargo, tras la imagen de esposa perfecta, Ernestina carga con el peso de estar casada con un hombre frío y autoritario, a quien hace años dejó de querer. Pero sobre todo carga con la gran culpa de haberse enamorado de otro hombre: el padre Félix Soriano, su cura confesor. Cuando éste sufra un accidente se abren muchas sospechas que llevan a Eleodoro a enterarse de su infidelidad y hace de su vida un calvario, una agresión física y sexual que ella resiste en silencio.
Asunción Mackenna (Antonia Zegers). Hermana menor de Eleodoro. Nunca se ha casado y siempre ha viajado por el mundo. Llega desde Estados Unidos obsesionada con las hermanas Fox y el espiritismo, y trae un libro prohibido que compartirá con sus amigos liberales, “El Libro de Los Espíritus” de Allan Kardec. Fue condenada socialmente en su juventud por involucrarse con un extranjero mayor que ella y separado. Al poco tiempo quedó embarazada y su hermano, para disimular la vergüenza, la obligó a viajar a uno de los fundos más apartados de la familia, donde dio a luz a una hija que, según le dijeron, nació muerta. Por culpa de estos maltratos es que siempre le guardó rencor a su hermano a quien considera un déspota y canalla. Asunción sabe hacer espiritismo y tienes cualidades de médium, prácticas que realiza en el más absoluto secreto, aunque cuenta con la complicidad de su cuñada Ernestina, en quien encuentra una amiga y aliada para enfrentar a Eleodoro. A través del espiritismo, comienza a tener premoniciones trágicas que la llevan a pensar que su hermano le ocultó la verdad en relación con su hija.
Melchor Mackenna (Diego Ruiz). Brazo derecho de Gabriel Varas en el hospital y en el caso de Carmen Marín. Es el hijo mayor de los Mackenna y siempre se ha caracterizado por sus ideas liberales y progresistas. Es un romántico que ama la poesía, las artes y sueña con un mundo con más justicia y bienestar para todos. Quiere mucho a sus hermanas, a su madre pero no así a su padre quien lo humilla constantemente. Teresita, la amiga de su hermana, está enamorada de él, pero Melchor solo tiene ojos para Micaela, la más bella prostituta de la Chingana de la Rosa. Se enamora a tal punto que le propone irse juntos y ser felices, lejos de todo, incluso de su propia familia. Sin embargo, el destino le ha jugado una mala pasada a Melchor quien descubre que la mujer que ama le ha mentido más de una vez; primero ocultándole que tenía un hijo, y lo más grave: la oscura vinculación de Micaela con su padre, Eleodoro.
Luisa Mackenna (Emilia Noguera) es una joven de alta sociedad, inteligente y culta, que lo maravilla con su belleza e ingenio. Su padre se opone a la relación que nace entre ella y Gabriel, no le agrada el pensamiento liberal del doctor, pero finalmente cede a la insistencia de su hija. Sabe que no es fácil convencer a Luisa, una joven madura y de carácter decidido, que sabe muy bien como llevar las riendas de su vida. Luisa y Gabriel comienzan una relación que va felizmente encaminada al matrimonio. Pero Varas recibe una misión que alterará todos los planes de su vida: debe estudiar el caso de la endemoniada. Durante el tratamiento, Carmen y el doctor se hacen muy cercanos lo que llena de celos a Luisa. Cuando descubra que Gabriel está enamorado de Carmen lo remecerá con una noticia inesperada.
Vitalia Mackenna (Alicia Rodríguez) es la menor del clan Mackenna, siempre ha sido una chica vanidosa, caprichosa y muy apegada a su padre, que la adora y accede a todas sus peticiones por muy deschavetadas que sean. Es interna en el convento de las Hermanas de la Caridad. Rival indiscutida de Carmen y líder del grupo de las malas compuesto por ella, Teresita y Elena. Juntas tramarán sórdidas historias en contra de sus compañeras, sólo con el fin de hacerlas pasar un mal rato y reírse de ellas. Vitalia es cruel. Ella será la encargada de ventilar los secretos del convento y los más escabrosos detalles de la posesión de Carmen, a través de su relación clandestina con Joaquín, periodista del diario La Gaceta.
Rosa Carreño (Francisca Gavilán) es una célebre prostituta, regenta de una conocida chingana donde se come, se bebe, se juegan cartas, se baila, se canta y se conocen prostitutas. Madre de Pedro y Carmen, quien al cumplir diez años comenzó a sufrir violentos ataques compulsivos que Pedro aplacaba con golpes y patadas. Desesperada, Rosa acudió al convento de sor Juana, entregándole a Carmen, a quien la religiosa presentó como una recogida. Los años pasaron y Rosa siempre se mantuvo atenta a todo lo concerniente con Carmen, se sentía orgullosa de que la niña estuviera recibiendo una buena educación. Rosa dejó de trabajar y se dedicó a administrar su chingana reclutando a las mujeres más bellas de la zona hasta que su secreto sale a la luz y se corre la voz de que Carmen, la poseída, fue criada en un prostíbulo.
Pedro Carreño (Gabriel Cañas) es el hijo de Rosa y hermanastro de Carmen. Siempre tuvo muchos celos de Carmen a quien maltrató constantemente durante su niñez, hasta que la mandaron a vivir con las monjas. Ambicioso, violento y arribista. Chantajea a las prostitutas para que atiendan a los clientes, especialmente a Micaela a quien obliga a asistir a las fiestas de los Altísimos organizadas por Eleodoro. Cuando Micaela se enamora de Melchor le informa a Pedro que dejará de ir a las fiestas, pero él no lo permitirá y amenazará con matar a su hijo. Como buen delincuente, lo mueve el dinero y verá una oportunidad de negocio en Adela, una joven novicia compañera de Carmen.
Micaela Rojas (Daniela Ramírez) nació en la más absoluta pobreza. Es una mujer hermosa, que tuvo un hijo con un hombre que la abandonó. Buscando un mejor pasar para su familia, Micaela dejó a su hijo con su familia para trabajar en Santiago. Después de tocar muchas puertas y de varios días sin comer, llega a la chingana donde Rosa le ofrece trabajo y se convierte en la prostituta más requerida de La Chimba, incluso por el poderoso Eleodoro quien la convirtió en su favorita. Sin embargo, Micaela conoce a un cliente muy especial, Melchor, un joven que le promete amor eterno y del cual se enamora al punto de querer dejarlo todo. Su sueño se derrumbará cuando Pedro comience a chantajearla con asesinar a su pequeño hijo si abandona la prostitución. Micaela se siente atrapada, no está dispuesta a poner en peligro la vida de su hijo y tampoco puede confesarle a Melchor su máximo y más cruento secreto: es la prostituta preferida de su padre.
El doctor Bernardo Urmeneta (Óscar Hernández) es el director y jefe de Gabriel en el hospital. Es el mejor amigo de Eleodoro quien, entre otras cosas, lo ayudó a él y a su esposa a adoptar una guagua cuando sus intentos por tener hijos de forma natural resultaron infructuosos. Proviene de una familia acomodada y camina por la ciudad con aires de grandeza. Y al igual que Eleodoro es miembro del grupo secreto llamado los Altísimos en el que diferentes personajes de la alta sociedad se congregan una vez al mes para mover los hilos que sostienen la ciudad. Cuando Eleodoro se da cuenta de que el caso de Carmen podría serle útil en su afán de llegar a la presidencia, le pide a Bernardo que lo ayude manipulando a Marín con métodos crueles y abusivos para hacerle creer que realmente está poseída. Él acepta pero cuando su conciencia le impida seguir, tendrá que decidir entre sus valores y las amenazas de Eleodoro con exponer la verdad del pasado.
Ángeles Urmeneta (Ignacia Baeza) es hija de Bernardo. Casada con Joaquín, con quien sufrieron mucho tiempo por no tener hijos. Finalmente tuvieron a su hijo Ignacio, la adoración de la familia. El pequeño sufre un terrible accidente que lo deja al borde de la muerte, su propio abuelo, el doctor Urmeneta lo desahucia. Pero Ángeles no está dispuesta a perder a su hijo, acude a una sesión de exorcismo de Carmen y, en medio de la posesión, decide hablar con el demonio que habita en ella ofreciéndole el alma a cambio de salvar la vida de Ignacio. El niño milagrosamente se salva pero comienza a tener extrañas conductas que ella se cuestiona son producto de su promesa al demonio e intentará remediarlo. Ángeles no imagina que además deberá sufrir por los secretos que su esposo y su padre le han guardado.
Joaquín Orrego (César Sepúlveda) es periodista del diario La Lealtad de Santiago, hombre de letras, muy entregado a su trabajo. Casado con Ángeles y padre de Ignacio. Vive el día a día soportando el ninguneo de su suegro, Bernardo, quien piensa que su hija merecía a alguien mucho mejor, sumado a las dudas de su esposa que cree que Joaquín debería cambiar de rubro. Pero Joaquín es orgulloso y está decidido en sacar adelante su carrera cueste lo que cueste. Su tozudez se ve premiada cuando el caso de Carmen despierta el interés de todo el país y resulta que él está en la mejor posición para conseguir las primicias: Vitalia Mackenna, hija de Eleodoro y compañera en el convento de Carmen, está obsesionada con el joven periodista y le ofrecerá información privilegiada del caso con el objetivo de seducirlo.
Vicente Smith (Tiago Correa) es el hermano mayor de Gabriel. Después de servir en el ejército durante la guerra del Pacífico, ingresó a la policía dónde logró ascender hasta comisario. Es un hombre duro, pragmático y honesto. Comenzará a investigar la muerte de un sacerdote a quien encuentran rodeado de símbolos satánicos. Así, con la ayuda de un viejo compañero de armas convertido en religioso, el padre Zisternas, irá descubriendo poco a poco, pistas que lo llevarán a sospechar de uno de los hombres más poderosos de Chile, el aristócrata, Eleodoro, cuya hija está comprometida para casarse con su hermano. Esto viene a complicar más aún la relación entre Vicente y Gabriel, a quién no le perdona haber abandonado a la familia para irse a estudiar a Europa, tiempo en que su madre murió. Sus investigaciones pueden poner en peligro su vida y la de su hermano.
Alfredo Gutiérrez (Francisco Ossa) es el mayordomo de la casa de los Mackenna. Durante diez años ha trabajado para Eleodoro quien lo llevó a Inglaterra para perfeccionarse. Es el jefe de la servidumbre, estricto y silencioso, mira en menos a los demás empleados y sirvientas aunque viene del mismo mundo. Su característica más importante es que es leal hasta la muerte con Eleodoro. A veces, encomendado por su patrón, debe cumplir misiones secretas como espiar, robar y hasta matar. Es su sirviente y cómplice de sus más oscuros secretos.
Guacolda Paillán (Gabriela Arancibia) es una mujer servil, amable y devota de sus amos. Proveniente de una familia mapuche, fue nacida y criada en la casa Mackenna junto a su madre, sirvienta de la familia. Guacolda es fiel a sus costumbres y tradiciones milenarias, siempre está dando consejos y calmando males. Muy apegada a Luisa y a Ernestina. Todos la quieren mucho a excepción de Vitalia que no le tiene ningún respeto y la vive ninguneando. Guacolda tiene conocimientos de machi, que compartirá con Asunción, y con los que también intentará ayudará a Carmen. Estos mismos secretos le serán útiles para defenderse de los ataques de su patrón, Eleodoro, en los pasillos de la mansión.
Sor Beatriz Alemparte (Taira Court). Viene de una familia acomodada y en la adolescencia desarrolló una devoción por la virgen del Carmen que la llevó a tomar los votos a temprana edad. Sor Beatriz entró al convento dispuesta a entregarse a la castidad y a transformarse en madre superiora. Envidia profundamente a sor Juana y considera que no tiene la clase social suficiente para ser la directora del convento. Sor Beatriz quiere arrebatar su puesto a como dé lugar. Es entrometida y portadora de varios secretos al interior del convento, sobre todo de Vitalia, en quien ve a una igual socialmente por lo que la protege y ampara en sus maldades contra Carmen la preferida de sor Juana.
Adela Soto (Magdalena Müller) es una joven e inocente novicia que quiere a Carmen como si fuera su hermana. Es su mejor amiga y conoce sus más íntimos secretos. Adela sufre cuando ve a Carmen poseída y quiere ayudarla, pero le da mucho miedo su estado. En el convento sufre de los constantes abusos verbales de Vitalia y sus amigas, pero como buena cristiana siempre muestra la otra mejilla y reza por la salvación de las niñas. Lamentablemente, Adela tiene los días contados en el convento pues sus padres se han quedado sin dinero para mantenerla en la ciudad y deberá volver al sur cuanto antes. Carmen le dice que Rosa puede prestarle el dinero, es así como conoce al malvado Pedro quien con oscuras intenciones se acercará a ella para enamorarla.
Elena Subercaseaux (Camila Roeschmann) es amiga de Vitalia y Teresita. Hija de acaudalados inmigrantes franceses. Por más que trata no logra comprender la maldad de sus amigas, no le causa gracia la mentira ni la burla. Poco a poco se irá distanciando de ellas para acercarse a Adela y Carmen lo que causará la furia de Vitalia y Teresita, que le declararán una guerra sin piedad.
Teresita Cousiño (Constanza Contreras) es la mejor amiga de Vitalia, hija de una familia de nuevos ricos. Es miembro de la aristocracia criolla, cómplice de Mackenna en todas sus aventuras y esconde todos sus secretos. Teresita está secretamente enamorada de Melchor, el hermano de Vitalia, y hará todo lo posible por conquistarlo, aun cuando él está locamente enamorado de una prostituta. Se unirá a su mejor amiga para, a como dé lugar, comprometer a Melchor y casarse con él.
Fotografías gentileza TVN.