Aunque en apariencias Teresita Echenique, la hija menor de José Luis (Gabriel Cañas) y Leonor (María Gracia Omegna), es una joven ejemplar, respetuosa y algo introvertida, su despertar sexual genera en ella una doble personalidad transformándola en una mujer misteriosa, sensual y apasionada que esconde un secreto que enciende las noches de la Querencia. De este complejo y osado personaje, los nuevos resguardos que Mega incorporó para abordar las escenas de sexo y violencia muy presentes en la historia, y su regreso a las teleseries a tres años de “Edificio Corona” hablamos con Vivianne Dietz en Teleseries.cl.
Por Pablo Carrasco.
¿Cómo se siente estar de vuelta en Mega?
Me siento muy feliz, muy afortunada de poder ser parte de esta historia y de volver a Mega que es un canal muy querido para mí. Solo gratitud.
Cuéntanos de Teresita Echenique.
Teresita Echenique es la hija del señor de la querencia y es una joven muy especial. Sufre mucho a lo largo de su vida, lo que desencadena en ella una serie de comportamientos. Es una muchacha mimada, devota de su padre (Gabriel Cañas) y por primera vez descubre el amor, lo que la llevará a ser la enemiga de su madre (María Gracia Omegna).
Esta es tu segunda teleserie de época después de “Yo Soy Lorenzo”. ¿Cómo te sientes interpretando nuevamente a una mujer en el Chile de otros tiempos?
Me fascina actuar de época. Creo que es súper interesante poder jugar en ese espacio, en parte, descubrir al personaje a través de un contexto histórico alejado de la actualidad. El trabajo se llena de detalles que enriquecen el proceso.
¿Qué tal ha sido trabajar con tu nueva familia ficticia?
Con todos había trabajado antes, en teatro o en televisión, y por ende hay una confianza y un goce que hace que las escenas, sobre todo las difíciles, sean mucho más amenas.
¿Influyó en tu construcción de personaje que una parte del público ya tenga presente la primera interpretación que se hizo de Teresita Echenique a cargo de Celine Reymond?
Creo que uno de los grandes desafíos es poder estar a la altura de lo que hizo Celine, que es una increíble actriz, sensible y potente. Por decisión no quise ver la teleserie antes. Leí todos los capítulos y traté de construir el personaje según mi percepción en base al texto, ahora ya en la recta final de las grabaciones he visto un par de capítulos y quizá no está tan alejado de lo que estamos construyendo. Y creo que en esas sutiles diferencias podrán ver las historias en general desde otra perspectiva.
¿Qué opinas que Mega haya decidido adaptar una teleserie exhibida dieciséis años atrás por otro canal en vez de apostar por una historia original?
Creo que es apostar por una historia potente y ponerla en un contexto en el que nos cuestionemos que tanto hemos evolucionado como sociedad. Evidentemente, a pesar de ser una teleserie que ya se hizo, será distinta en términos de perspectiva de género, en términos estéticos y aprovechando a nuestro favor las nuevas tecnologías para contar esta historia de la mejor manera posible.
En el año 2008 la historia sorprendió por lo osada que fue al incluir escenas de desnudos y que insinuaban actos muy violentos, siendo temas que en producciones posteriores fueron bajando su intensidad o definitivamente desaparecieron. ¿Cómo ha sido abordar un proyecto de estas características?
Efectivamente mi personaje tiene escenas de desnudo y en ese caso y por petición, cuento con una doble de cuerpo que realiza esas escenas por mí. Por lo demás, hay un coach de intimidad, que es Eduardo Paxeco, quien se encarga de los desnudos y escenas de sexo, lo que ha facilitado y ha otorgado un lugar seguro en ese aspecto.
De hecho, en la versión original no existían esos protocolos para enfrentar escenas de intimidad. ¿Qué te parece que ahora cuenten con un coach para ese propósito como lo hacen en producciones internacionales?
Me parece necesario y acorde a los tiempos. Se ensaya y graba con equipo reducido y básicamente se coreografía la escena. Lo que ha funcionado perfectamente.
¿Cuál crees que sea el aporte de “El Señor de la Querencia” este 2024?
Probablemente sirva para replantearnos que tanto hemos avanzado como sociedad. Si bien es una historia de más de cien años, hay muchos patrones, que efectivamente están exacerbados en esta ficción. Pero en la médula, muchos de estos temas, como el machismo, la violencia y el clasismo siguen siendo una problemática hoy en día.
Fotografías gentileza Mega.