“La señora Antonia (Paola Volpato) con don Gaspar (Jorge Arecheta) se van a llevar a la niña en barco”, con esas palabras la cocinera de los Sanfuentes Williams alertó a Eloísa (María José Weigel), revelando en el penúltimo capítulo los planes que sus patrones tenían con la pequeña. Pero eso no será todo, en el episodio final, Marta volverá a ser de gran ayuda para la doctora González. En Teleseries.cl conversamos con la actriz oriunda de Curacaví, quién nos contó más detalles de su personaje y su participación en la teleserie ambientada en Valparaíso de 1937.
Por Osvaldo Donoso.
Luciana, qué nos puedes contar de ti.
Yo tengo treinta y tres años. Realicé mis estudios en Buenos Aires, en la escuela de Teatro de Avellaneda, que es una escuela de actores y titiriteros. En Argentina trabajé mucho en teatro, en centros culturales, en cooperativas y ese tipo de cosas, y en el 2019 yo volví a Chile, por una emergencia familiar en verdad, pero me quedé porque también mi sueño era trabajar acá, quería ser actriz y trabajar en Chile. Cuando llegué de vuelta estuve en “Demente” y ahí conocí al director de “Hijos del Desierto”. En el audiovisual también había estado en películas independientes y cortometrajes, pero “Hijos del Desierto” fue mi primer proyecto con continuidad completa, un personaje de principio a fin.
¿Cómo llegaste a la nocturna de Mega?
Yo no hice casting para “Hijos del Desierto”, pero si había hecho muchas pruebas de cámara en Mega. Entonces me llamó Romina Cañete y me dijo que el director quería que yo hiciera ese personaje. Fue súper emocionante porque yo no tenía la experiencia de una teleserie completa y es algo muy preciado porque ahí uno desarrolla un personaje. El personaje puede crecer, tienes muchas más posibilidades que un bolo que dura una semana y sale en cuatro o en cinco capítulos. Ella me explicó un poco el personaje, muy por encima, y después tuve una reunión con Patricio González y él me contó que era una cocinera de la casa de los protagonistas, que en un principio sería solo eso y después iba a ir creciendo. Ahí se me ocurrió de inmediato decirle que yo cantaba cueca. Y él me respondió muy emocionado si tocaba guitarra igual. Yo la verdad es que sí tocaba guitarra, pero no tocaba cueca en guitarra, que es bastante difícil. Yo le dije que sí jajajá. Como dicen los actores viejos: “un problema a la vez”. Hay que decir que sí a todo. Tengo la suerte de que soy sobrina de Mirtha Iturra, la llamé de inmediato y le dije que necesitaba sacar cuecas con guitarra y ella me entrenó para yo poder hacer ambas cosas, porque claro, cuando yo era niña ella me enseñó a cantar cueca, pero no a tocar guitarra, bien digamos, entonces estuve harto tiempo con clases y obsesionada hasta que lo logré. Más adelante me pusieron las cuecas y siento que el personaje despegó después de eso porque la gente empezó a recordar a la cocinera que canta.
¿Cómo fue interpretar a Marta, esta cocinera de los Sanfuentes Williams?
A mi Marta me robó el corazón. Yo quería desarrollarla y hacerla bien, entonces me puse de cabeza a estudiar como era en ese tiempo el tema de las cocineras. Con la Paola Volpato y la Francisca Gavilán sacábamos conclusiones de como eran estas mujeres pobres que iban a trabajar desde muy chicas. Yo estoy segura que Marta estuvo en esa cocina de los nueve años, que estuvo en el lugar de Juanita. Yo sé que Marta empezó como niña de mano y termino como la jefa de la cocina de ese lugar. Fue muy lindo interpretarla porque es una mujer sencilla, alegre, de estas mujeres chicha fresca, como de esas que nacen chicharra. A mi me encantó interpretar a Marta porque terminó siendo una heroína de la historia, fue muy lindo.
“Hijos del Desierto” se caracterizó porque cada personaje tuvo su momento. En el caso de Marta, en los últimos capítulos incluso arriesgando su vida para ayudar a Eloísa y Pedro (Gastón Salgado). ¿Qué te pareció ese desarrollo?
No me lo esperaba. En un momento me escribe el director y me dice vas a empezar a cantar en la cantina y te van a querer reclutar para este ejército antinazi. Así empezó el crecimiento de Marta. Y estuvo bueno porque empecé a tener más escenas, a compartir con Gastón Salgado y la María José. Ahí Marta empezó a florecer y a la gente le gustó mucho ese giro inesperado de que Marta ayudara a rescatar a Marianita. Con la Florencia todo el tiempo detrás de cámara decíamos que nos íbamos a robar a la guagua, que ese era nuestro destino. No fue tan así, pero ayudamos jajajá.
¿Y cómo fue trabajar con Florencia Crino, Juana en la historia?
Hice muy buena onda con Florencia, crecimos juntas como actrices. La Florencia tenía otros proyectos encima, pero acá nos súper afiatamos las dos. La dupla fue heavy, nos llevamos muy bien y con la Pancha también, éramos las criadas de todo el set, era muy gracioso. Con la Florencia nos preocupamos mucho de escuchar. Estábamos con Pancho Melo, con Paola Volpato, con la Panchita Gavilán, que son tremendas bestias de la actuación. Yo creo que de mi experiencia lo que más me llevo es el aprendizaje que tuve con ellos.
¿Qué te pareció compartir escena con ellos?
Es un tremendo honor trabajar con Pancho Melo, con Paola Volpato, con Jorge Arecheta, que igual tiene mucho más experiencia que nosotras. Yo evalúo mi paso por “Hijos del Desierto” como un tremendo aprendizaje. Fueron muy generosos con el hecho de que todos sabían que era nuestra primera teleserie, que éramos nuevas en el mundo audiovisual, entonces nos ayudaron un montón. Hay muchas cosas del audiovisual que uno aprende solo haciendo, que no te enseñan en ninguna escuela, en ninguna parte, uno lo aprende en el set. Yo creo que en toda la teleserie pasó lo mismo, éramos varios jóvenes que no teníamos tanta experiencia y los actores más grandes fueron muy generosos con todos, siempre se sentaron con nosotros a hablar del oficio, te corregían ciertas cosas que uno no tiene interiorizado. Hay cosas que uno no sabe desde afuera, por ejemplo, cuando yo ya cantaba en la cantina y llegó la hija de María a la casa, Marta ya sabia que algo estaba pasando. Entonces la Pao (Volpato) detrás de escena me dijo: “Marta ya está cantando en la cantina, Marta ya sabe lo que pasa, debes tener otra actitud frente a la escena”, y claro son cosas pequeñas que hacen mucho la diferencia y ellos fueron súper generosos con eso.
Una gran experiencia para empezar.
Yo soy de Curacaví e “Hijos del Desierto” se grabó acá en Curacaví, en el lado del campo pero se grabó acá, y yo llevé a los extras. Yo a veces estaba en mi casa y me llamaban del set que tenía que llevar gente y fue muy loco porque estaban emocionadísimos y contentos de que hubiera una teleserie acá, todos querían ir. Aprendí por todas partes, aprendí de producción de extras, por supuesto que crecí mucho como actriz. Fue una experiencia completa para mí, fue muy lindo.
¿En qué estás actualmente? ¿Tienes nuevos proyectos?
En televisión voy a estar en “Generación 98”, ahí voy a ser Blanca, recepcionista de un hotel para adultos mayores donde está Francisco Reyes. Estoy con un pequeño personaje en la serie “Los Mil Días de Allende” y voy a estar en otra serie a fin de año. Estoy a full, muy contenta con mi trabajo y con lo que he crecido como actriz en este poquito tiempo.
Fotografías reproducción Mega.
2 comentarios
Luciana una tremenda mujer y actriz ❤️
Excelente actriz y gran persona. 👏👏👏
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